Dr. Emilio L. Juan García
Cirugía Ortopédica y Traumatología
LA RODILLA
Cartílago
Cartílago
¿Qué es?
El cartílago hialino articular es la superficie que recubre el final de los huesos en la articulación. Si le llamo "ternilla" quizás se entienda mejor.
Es una estructura blanca resistente, que cubre la superficie donde un hueso articula con el otro, siendo en este caso de la rodilla, la superficie tibial con la femoral y la femoral con la rotuliana.
Recordemos que los meniscos y los ligamentos mantienen la estabilidad de la rodilla, para que la superficie prácticamente convexa del fémur pueda flexionar sobre la superficie prácticamente plana de la tibia, siendo la superficie cartilaginosa la que permite este movimiento sin fricción.
Por lo tanto el cartílago tiene 2 misiones fundamentales en la rodilla:
- Elasticidad, ya que es capaz de absorber los impactos, propiedad muy importante en la rodilla.
- Reducir la fricción, ya que la superficie debe ser lo más lisa posible y evitar lo máximo posible el rozamiento.
¿Por qué se desgasta el cartílago de la rodilla?
Los motivos son innumerables, unos conocidos y otros no.
Pensemos en la rodilla como una máquina perfecta, con un movimiento de flexo-extensión y rotación, con unas superficies de rozamiento que están sometidas a una carga biomecánica. Pues desde el punto de vista simplemente biomecánico, cualquier alteración del eje, fallo de algunas de las estructuras de su interior (meniscos, ligamentos...), desalineaciones, alteración en sus estructuras externas (músculos, tendones...), cuerpos libres por desprendimientos que se interponen en el movimiento, sobrepeso y un largo etcétera, provocan que esa superficie de rozamiento, poco a poco se vaya estropeando.
El tipo de trabajo, el tipo de deporte, los procesos traumáticos previos, la herencia, múltiples enfermedades... ¡muchos motivos!
¿Qué tipos de lesiones sufre?
Básicamente de forma más frecuente sufre 3 tipos de lesiones:
- Derivada del propio desgaste, con distintos grados según la importancia, hablando de condropatías grado 1, 2, 3 y 4. Quizás suene el término "condromalacia", cuando hablamos del grado 1. Evoluciona con el tiempo, generalmente hacia la artrosis.
- Derivada de traumatismos previos, como cuando sufrimos alguna lesión haciendo deporte, en una accidente de tráfico o simplemente bajando una escalera, nos lesionamos meniscos, ligamentos, fracturas óseas o el propio cartílago. Úlceras, fisuras o flaps condrales, fragmentos libres articulares...
- Derivada de enfermedades que pueden ser solo de la rodilla o enfermedades sistémicas que afecten a las articulaciones. Aquí se incluye una gran variedad como las osteocondritis, procesos inflamatorios, infecciosos, reumáticos...
¿Cómo se diagnostica?
Para el diagnóstico es fundamental una correcta historia clínica y una exploración exhaustiva por parte de su médico especialista en rodilla.
Las pruebas complementarias como las radiografías o la resonancia ayudan al diagnóstico, pero las radiografías no mostrarán nada salvo que la artrosis ya sea llamativa, y la resonancia no tiene mucha fiabilidad en el estudio del cartílago. Obviamente el diagnóstico exacto se tiene con la artroscopia, en la que vemos y tocamos el cartílago articular, pero esto supone ya una pequeña intervención quirúrgica.
¿Cómo se tratan las lesiones del cartílago?
Las lesiones del cartílago tienen un tratamiento muy complejo, no porque técnicamente sea difícil, sino por las propias características del tejido cartilaginoso y por la gran variedad de causas que provocan sus lesiones.
Básicamente hoy en día:
1.- Prevenir su degeneración con medicaciones y tratamientos específicos y resolviendo todas las posibles causas como alteraciones del eje, roturas meniscales, lesiones ligamentarias, enfermedades, sobrepeso...
2.-Si la lesión es focalizada, se puede intentar la fijación del fragmento si es sintetizable. Si no es sintetizable, "tapar" el defecto que esté en zona de carga con alo o auto-injertos osteocondrales, o intentarlo con la variedad de productos biológicos que tenemos en nuestras manos.
3.- Si la condropatía es diseminada, la artroscopia permite una visión exacta del grado y extensión de las lesiones y permite mejorar la fricción de la superficie condral, podemos aplicar productos biológicos en las fases iniciales y en los casos avanzados con artrosis, la prótesis
